Vacía farmacia de alto costo del IVSS y con la estructura cayéndose

  • Pacientes crónicos hacen colas desde las 3:00 am en espacios que se encuentran en condiciones deplorables. La mayoría se va sin ninguna medicina

Doriana León.- Largas colas sin ningún tipo de confort y sin la certeza de obtener o no las medicinas, sufren los pacientes crónicos que acuden diariamente a la farmacia de alto costo del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales, en La Guaira.

Espacios oscuros, malolientes y sin butacas o sillas donde descansar mientras esperan, aguardan a los enfermos, quienes en la mayoría de los casos salen sin nada de lo que estaban buscando.

Zuleima Rodríguez le busca las medicinas a su madre que sufre de artritis. Asegura que desde las 4:00 am estuvo esperando para buscar su medicina y no fue sino a las 2:00 pm cuando le dijeron que no estaba disponible.

“Mi mama tiene más de un año sin tomar Plaquinol, que es el fármaco que le recetó el reumatólogo para disminuir sus dolencias y el deterioro de la movilidad de sus articulaciones. Siempre que nos dicen que llegaron medicinas venimos a ver, pero salimos sin nada”.

Antonieta Rodríguez, paciente con trasplante de hígado desde hace 9 años, señala que aunque mensualmente recibe su tratamiento sin complicaciones, es inhumano que pacientes con condiciones especiales tengan que esperar tanto tiempo de pie y sin tener, ni siquiera, un baño.

“La mayoría de los pacientes que venimos para este centro somos sobrevivientes de alguna enfermedad o algunos están luchando contra patologías crónicas. Uno se deprime más viendo las condiciones en las que está la farmacia. Aquí vemos como la gente se desvanece mientras espera para que le entreguen sus medicinas, si es que hay”.

Los pacientes responsabilizan al Gobierno de la escasez que afecta a los convalecientes. “El Ejecutivo nacional debe asumir sus responsabilidades y abastecer farmacias y hospitales. Estamos en una crisis muy difícil, sobre todo para los que necesitan atención en salud”, dijo Consuelo Mata.

Los diabéticos que van en busca de insulinas aseguran que por la larga espera se les derrite el hielo que guardan dentro de una cava para que no se descomponga el medicamento.

Para los pacientes que acuden a las consultas de emergencia en el hospital José María Vargas están agotados casi todos los medicamentos. “De cinco fármacos que me recetaron por una crisis asmática, no conseguí ni uno”, declaró.

Medardo Fernández pidió al director del Seguro Social, Carlos Rotondaro, que humanice la atención en el servicio. “No se puede tapar el sol con un dedo. La falta de medicinas es evidente, y los espacios de la farmacia están severamente deteriorados”.

Mientras que el equipo reporteril del Diario La Verdad realizaba entrevistas a los pacientes en la sala de espera de la farmacia, los directivos del establecimiento limitaron el trabajo, asegurando que para poder hablar con los beneficiarios “hay que pedir autorización de la Dirección del hospital.DLR/va

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