Vendedores ambulantes de comida se las están viendo “negras”

Conseguir materia prima para preparar empanadas, bollos, arepas y café es difícil actualmente por la escasez de alimentos, así lo expresó Luis Iriarte quien lleva 25 años vendiendo comida en la zona este.

“Es la primera vez que me cuesta tanto. Yo vendo empanadas y tengo que hacer largas colas para conseguir la harina. Debo hacer ese sacrificio pues este es el único ingreso en mi hogar de tres personas”, dijo. Explicó que ha tenido que bajar la cantidad de empanadas ofrecidas, pues todo le sale caro.

“Los rellenos los compro caros, por eso la empanada la vendo en 200 bolívares, más barato no puedo, además no preparo muchas. Salgo a las 5:00 de la mañana de mi casa esperando conseguirme buenos clientes”.

En el caso del café, comenta que paga el medio kilo en 1.500 bolívares y como no hay azúcar debe ponerle un toque de papelón al termo. “Vendo el vasito en 60 bolívares porque el gasto es fuerte. Gracias a Dios hasta ahora puedo seguir vendiendo”.

Han proliferado en las colas

Iriarte asegura que en el último año han incrementado los vendedores de comida ambulantes, sobre todo en las colas. “Aprovechan a toda esa gente y es válido porque no hay empleo y la gente tiene que resolver, generalmente venden solo medio día”.

Detalló que hace varios años solo él vendía café en la avenida principal de Caribe, pero actualmente ya hay 12 vendedores de este producto.

De las colas han surgido numerosos trabajos que van desde venta de alimentos y bebidas, hasta alquiler de sillas y paraguas, entre otros. MEM/jd