Varados más de 400 pasajeros de Avianca por suspensión de operaciones
*Según la aerolínea la medida obedece a “limitaciones registradas en las últimas horas”
Más de 400 pasajeros de los vuelos 069 y 081 de la aerolínea colombiana Avianca, con destino a Bogotá, quedaron varados en el Aeropuerto Simón Bolívar luego que la empresa, a través de un comunicado, informara que suspendería sus operaciones desde y hacia Venezuela a partir ayer.
Esta medida tomó por sorpresa a los trabajadores y a los pasajeros, debido a que el día anterior, también a través de un comunicado, notificaron que el cese estaba previsto para el 16 de agosto. Además, agregaron que esta medida está “encaminada a preservar la seguridad”.
Pasajeros responsabilizan al INAC
Sin embargo, en los pasillos se rumoró que se trataba de una decisión administrativa del Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (INAC) de Venezuela y no por motivos internos, pues ya existían acuerdos con sus clientes.
“El Instituto suspendió a Avianca, no hay nadie que dé la cara por la aerolínea ni por el Aeropuerto, para que nos den una respuesta satisfactoria. Se está haciendo una carta para presentársela al INAC, porque no se justifica que la empresa tenía una programación hasta el 16 de agosto y ahora nos salgan con esto. Es un arranque de ira de sus directivos”, manifestó Enrique Romero.
Pasajeros estaban confiados que era hasta el 16-A
Era tanta la certeza que tenía la aerolínea en mantener sus operaciones, que incluso el martes vendieron boletos. “Yo compré mi pasaje de ida el miércoles en la noche, y me cobraron 1.371 dólares y a media mañana del jueves me llegó un correo diciendo que la operación no funcionó y que todo fue cancelado”, dijo Luis Romey.
Según la empresa, los viajeros con vuelos programados para esta semana serán embarcados en “otras aerolíneas, de acuerdo a su disponibilidad. A los viajeros con reserva que no sean reacomodados, se les reembolsará el 100% del valor de sus boletos”.
“Mi vuelo estaba programado para las 6:00 pm con destino a Bogotá, y luego tenía que hacer conexión para irme a Ecuador. Esto me tiene muy preocupado, porque tengo que viajar, ya que voy a participar en un evento y necesito estar allá. Algo tienen que hacer, porque yo no tengo bolívares y los gastos están cargados a mi tarjeta de crédito, y todo me va a salir más caro”, expresó Carlos Echeverría.
Más de cuatro horas de agonía
La desesperación de los pasajeros duró más de cuatro horas debido a que los mostradores estuvieron cerrados, y no fue si no hasta pasadas las 11 de mañana cuando se acercaron unos cuantos trabajadores de la aerolínea y funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana para confirmar la información que estaba publicada en las pantallas.
Los uniformados pidieron a los viajeros hacer una cola para que pasaran de uno en uno y tomarles sus datos personales, y así garantizarles el traslado con otras aerolíneas, pero sin precisión de fecha, porque deben revisar la disponibilidad.
“Yo estoy aquí desde las 6:00 am y ahora es que me van a decir que no vamos a volar hoy y tenemos que esperar una llamada. Llegamos y lo primero que vimos fue el letrero, pero en los mostradores no había nadie”, señaló Miguel Vasco, pasajero con escala para Madrid.
Exigen respuestas
Los ánimos se caldearon cuando los agentes de tráfico indicaron que no tenían alternativas. “No hay preferencia para los que tenemos conexiones ni para las personas de la tercera edad. Me parece una falta de respeto lo que están haciendo con nosotros, esto es muy similar al caso de Conviasa”, dijo Miguelángel Romero.
“Dijeron que se iban a poner en contacto con nosotros a ver si queríamos viajar por otra aerolínea o que nos reembolsaran el dinero, pero no estoy de acuerdo, porque cuando me toque comprar un pasaje no será la misma cantidad”, señaló Angélica Rivas.
“Tienen que darnos una solución, porque yo compré mi pasaje con cuatro meses de anticipación y ayer hice el chequeo a las 7:00 pm y todo estaba normal. Tenía planeado pasar cinco semanas en Madrid y mi hijo ya canceló el hotel y el alquiler del carro, y ese dinero no se lo van a devolver”, manifestó Boris Justin.
Aunque se intentó precisar mayor información con los trabajadores, estos se negaron porque ni ellos mismos saben qué va a pasar con sus empleos, ya que no les consultaron la medida. Son alrededor de 50 fuentes de trabajo que quedan en el limbo.