Proponen crear centros exclusivos para “parto humanizado”

Doriana León, [email protected] Penalizar la violencia, el maltrato obstétrico y garantizar que en el parto y el nacimiento prevalezcan el respeto y las relaciones afectivas entre la madre, el padre y el recién nacido son algunos de los aspectos abordados en el foro de este martes, en el marco de la celebración del Día de la No Violencia contra la Mujer.

El obstetra Dámaso Castellanos indicó la importancia de la creación de centros adecuados para el parto humanizado.

“Las 20 camas del materno y las 34 del Seguro Social de La Guaira, no se dan abasto para atender la alta demanda de nacimientos que hay en el estado”.

Señaló que es fundamental el aumento de los cupos de obstetricia en los hospitales de la región.

“Las condiciones en las que paren las varguenses, no son las adecuadas para el acompañamiento de un familiar durante el parto. “Al estar una persona que no es el paciente, se pierde la privacidad de la otra mujer que está al lado en la misma circunstancia”.

El uso excesivo del Pitocin también fue criticado. El doctor Castellanos señaló que al usar este medicamento, “se acelera el proceso de dilatación, pero se aumenta el dolor de las contracciones. El médico acelera su trabajo, pero la mujer sufre más”, dijo.

La doctora Oneida Sequera, jueza de ejecución con competencia en violencia de género, señaló que el artículo 76 de la Constitución Nacional obliga al Estado a garantizar asistencia y protección integral a la maternidad desde la concepción, durante el embarazo y el parto, asegurando servicios de planificación familiar integral, basados en valores éticos y científicos.

“Este mandato constitucional también incluye la protección específica a la maternidad, paternidad, niños, niñas, los adolescentes, las mujeres y la familia. Es por eso que se realizan este tipo de actividades, para crear conciencia y resaltar los derechos de las mujeres y los deberes de los médicos y enfermeras a la hora de atender un parto”.

Señaló que en Vargas el índice de denuncias por violencia obstétrica bajo, pero “es por la falta de conocimiento de la población”.

El ruleteo, el uso de medicinas no autorizadas por la paciente y hasta una mala palabra del personal médico a la parturienta, son consideradas por la Ley como un acto de violencia obstétrica./DLR