Play ball en el César Nieves
María Lourdes Arráez, [email protected] Al ritmo de la orquesta Diversidad Latina y de Macuto Samba Show, el gobernador Jorge Luis García Carneiro reinauguró los espacios del estadio de beisbol Cesar Nieves en Catia La Mar.
Aseguró que con esta obra se le da nueva vida a la parroquia y que el barrio Las Angustias, adyacente al campo deportivo, ahora cambia de nombre y se llama La Felicidad.
“Estamos conscientes que el Gobierno debe participar con la juventud para que Venezuela siga cosechando logros deportivos, todo lo que se ha hecho viene dirigido por el Gobierno nacional. Una Vargas nueva sale de las cenizas de la tragedia de 1999 con el bulevar, mercado comunitario y ahora el estadio”.
Explicó que la obra beneficiará a las escuelas de beisbol menor, las ligas y los centros educativos que realizan sus actividades deportivas en el lugar.
Recordó que Catia la Mar cuenta con el mejor terminal de pasajeros de toda Venezuela, además en los terrenos que estaban ocupados por gandolas, chatarra y basura, ahora viven 3.200 familias.
Se comprometió a que a partir de enero del próximo año inicien los movimientos de tierra para construir un campo de futbol en frente del urbanismo Hugo Chávez. “Soy un soldado que ha venido a trabajar para construir un estado más bonito”.
Puso en la mesa su candidatura a la Gobernación y espera la decisión de la Dirección Nacional del PSUV.
Informó que esta semana se cancelaron dos millones de dólares a la empresa constructora del estadio Los Tiburones para que arranquen de nuevo los trabajos, por lo que espera que para la próxima temporada de beisbol sea una opción para la liga profesional.
Luego de los lanzamientos inaugurales, donde ponchó al secretario de gobierno José Manuel Suárez, el Gobernador entregó implementos deportivos, trofeos y medallas para que se utilicen en la copa que lleva su nombre.
Alida Cruzco, representante de Criollitos de Venezuela, agradeció la reinauguración del terreno y solicitó en nombre de los atletas que se construya una Villa Olímpica detrás del estadio, para hospedar a los equipos que vengan a participar en competencias.
En 18 meses transformaron el espacio
El ingeniero Eduardo Dávila, ejecutor de la obra, explicó que encontró el estadio tomado por las asociaciones deportivas y rodeado por un cinturón de comerciantes informales que convirtieron las áreas en una zona inadecuada para el deporte, por lo que con una inversión de 270 millones de bolívares, en 18 meses lograron transformarlo por completo.
Detalló que rehicieron todos los servicios del campo deportivo, se modernizó la fachada, se construyó un área de vestidores, área de árbitros, sanitarios públicos, área VIP y se cambió el engramado por uno artificial. /ep