Pacientes del Seguro de La Guaira obligados a traer sus kits médicos

La falta de insumos sigue siendo uno de los mayores dolores de cabeza para muchos de los pacientes que acuden al Hospital Dr. José María Vargas, mejor conocido como el Seguro de La Guaira, para ser atendidos en los diferentes servicios.

Manifiestan que les solicitan ciertos medicamentos según la patología presentada por el enfermo. “Antes ellos corrían con todo eso, ahora uno debe comprarlos por fuera. Piden lo que llaman el kit para atender al paciente”, expresó uno de los consultados que fue a acompañar a su suegra de 84 años porque tenía la hemoglobina baja.

“Les hicieron su estudio de hemoglobina y la están atendiendo los médicos que aquí son excelentes. El único problema que particularmente yo veo es la falta de insumos y medicamentos”.

Otro de los entrevistados estaba a la espera de los resultados del examen de sangre realizado a su hija, a quien le diagnosticaron dengue.

“Vine el sábado porque tenía vómito y fiebre. Aquí le colocaron hidratación, un protector gástrico y un antiemético, mejorando ese día”.

Dijo que viene de Caraballeda y acudió este martes para el control de las plaquetas, porque como es dengue debe regularmente hacerse las pruebas de la hemoglobina.

Comentó que la atención en pediatría es excelente, el servicio es rápido, y que los baños tenían agua. Sin embargo, un grupo familiar se quejó del trato que reciben tanto los pacientes como sus familiares de parte de los vigilantes y médicos.

Estaban allí porque la hija daría a luz su tercer hijo, que en esta oportunidad será por cesárea. “El sábado comenzó a sentirse mal y la trajimos porque en el control nos dijeron que esta semana programarían la cesárea. Nos mandaron a hacer unos exámenes especiales que nos costaron 50 dólares. Estamos a la espera de que nos digan qué kit debemos comprar”.

Dos hermanas, quienes también se encontraban en el área de espera, acudieron ayer por primera vez al Seguro con la esperanza de que el director pudiera atender su solicitud de una intervención quirúrgica para la hija de una de ella, una joven de 19 años con una severa escoliosis.