Obra de Reverón resplandece a 61 años de su muerte

Lorena Correa, [email protected] Armando Reverón fue un artista plástico que partió de este mundo hace 61 años y aún su legado sigue vivo, tomando fuerza con la recuperación de su castillete en Macuto”, indicó Ricardo Pérez, director regional del Gabinete de Cultura.

Explica que a pesar de no haber nacido en Vargas, se enamoró del estado, residenciándose en Punta de Mulatos, para luego mudarse a Macuto a partir de 1921, donde realiza gran parte de su obra, que capta y transmite el impacto de la luz tropical. “Su vida artística comenzó a tomar fuerza en la región, pues su periodo de la luz nació aquí”.

Vida académica

Afirma que estudió en la Academia de Bellas Artes de  Caracas, en  España y en Francia. “Era una persona alegre, muy sociable y amigable, se la pasaba compartiendo en lo que actualmente es la parada de La Guaira, de Los Silos, incluso muchos de sus cuadros los intercambió por mercados y pescado para poder subsistir, haciendo un trueque con sus obras, según los comentarios de las personas que lo conocieron”.

Su legado sigue vivo

“Es un artista que se caracterizó por pintar con materiales no convencionales, además del óleo también usaba el excremento de las palomas, le daba un toque muy característico a sus obras con sedimentos ferrosos, tierra, piedra, con el material que encontraba a la mano experimentaba. Es considerado el mejor artista plástico del siglo XX en Venezuela”.

Sus temas preferidos

Manifiesta que el creador entusiasta del  impresionismo francés se interesó profundamente por la acción de la luz sobre las formas, asegurando que su pintura evolucionó la abstracción y el simbolismo. Los temas preferidos fueron el paisaje y el desnudo femenino.

“Hacía su velorio de cruz de mayo, festividad que actualmente es celebrada por los vecinos en la comunidad del castillete en honor a él. No solo fue un pintor, también escultor y muñequero, era conocido por sus famosas muñecas en tamaño real, incluso con cabellos; eran sus musas de inspiración. Las pasajeras de maderas fueron otras de sus creaciones”.

Construcción con materiales autóctonos de la zona

Explica que Reverón construyó varios ranchos en el terreno que compró en Macuto, el principal era su taller; las paredes eran de tabla, el techo de paja. Alrededor de la cintura se colocaba una gran bolsa en la que guardaba trozos de madera que le servían de pincel.

“Pudo desarrollar conocimientos más profundos de la naturaleza, llevándolo a emplear un método de pintar. Creó valores cromáticos e ideó nuevos soportes, utilizando elementos autóctonos, adaptado a procedimientos y materiales que se adecuaban a su afán de representar la atmósfera del paisaje bajo efectos del deslumbramiento producido por la luz directa del sol”.

El castillete

Señala que su casa en «Macuto (Venezuela)» Macuto fue declarada Museo Armando Reverón. En 1999, lamentablemente fue destruida por la tragedia de Vargas. En octubre de 2014 se anunció un proyecto a través del Instituto Autónomo de Infraestructura, que contempla un circuito integral turístico con la reconstrucción del Castillete. Una réplica de la edificación servirá como centro cultural, donde se dictarán talleres, cursos, charlas, y además funcionará como una pequeña cinemateca. LC

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