Farmacias reducen horarios y personal para sobrevivir

 

• Aseguran que tienen poco que ofrecer y que las cuentas no dan para cubrir sueldos y gastos operativos

Doriana León.-

La escasez, la falta de liquidación regular de dólares para la compra de fármacos e insumos, la inflación y los constantes aumentos salariales decretados por el Presidente Nicolás Maduro tambalean la estabilidad de laboratorios, farmacias y consultorios privados, al borde de considerar el cierre o la reducción a mínima capacidad de la nómina de los establecimiento.

Daniela Dorta, regente de una farmacia con más de 20 años en el estado, señala que en los últimos meses se ha reducido la nómina en tres oportunidades.

“Desde noviembre de 2016, cuando teníamos 15 trabajadores en total, bajamos a 12, luego en enero disminuimos a 10 y en mayo quedamos solo 9. Con el nuevo aumento seguramente habrá una nueva reducción, situación que genera preocupación y desasosiego entre todos los trabajadores, ante el futuro incierto”.

Carmen Suarez, auxiliar, destaca que en la farmacia donde trabaja han disminuido los horarios; solo trabajan hasta las 6:00 de la tarde y los sábados medio día. “No abrimos los domingos porque los dueños no pueden pagar el día doble. Hasta el 2014 quedábamos de turno en las noches y habían varios equipos de guardia, ahora solo trabajamos tres personas”.

Actualmente solo la cadena Farmatodo, en su sede de La Lucha ofrece el turno las 24 horas. De resto, las farmacias independientes no asumen estos horarios pues no tienen cómo pagarle al personal.

En el caso de los laboratorios, la situación también es crítica. Aunque hasta ahora no se han registrado cierres totales, el Colegio de Bioanalistas si ha notificado de reducción de horarios por falta de reactivos e imposibilidad de pago al personal por turnos.

“Con reactivos que aumentan hasta un 100% cada 20 días y constantes aumentos salariales, mantenemos las finanzas severamente golpeadas. En este laboratorio sólo se trabaja de lunes a viernes. En la mañana se toman las muestras y en la tarde viene la bioanalista a procesarlas. Solo quedamos tres trabajadoras”, dijo

Tatiana Farías, recepcionista de un laboratorio en La Guaira.

El año pasado, el 90% de las clínicas cerraron sus turnos de laboratorio durante las noches. Por esta situación quedaron sin empleo al menos 30 bioanalistas más los auxiliares. El argumento de los dueños de los centros es la falta de liquidez para el pago de cestatickets, salarios y bonos al personal./DLR