GNB y Polivargas reprimieron protesta en Punta de Mulatos
** Vecinos se niegan a pagar en efectivo el precio de la bolsa de Bs. 336 mil
Luisana Brito
A punta de perdigones y con equipo antimotines la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y Polivargas dispersaron la protesta protagonizada por los vecinos de Punta de Mulatos, La Veguita y Guanape 1 y 2, entre otros sectores, de la parroquia La Guaira, donde los ánimos se caldearon y la comunidad, “en defensa” comenzó a lanzar piedras y botellas.
La arremetida de los cuerpos de seguridad afectaron hasta la salud de los más pequeños y adultos mayores, pues los gases que cayeron en sus patios y techos les generaron dificultad para respirar. Aunque intentaron refugiarse estos fueron más veloces y los alcanzaron.
En la entrada de la comunidad todavía yacen los cartuchos de los perdigones de la GNB y las botellas rotas que utilizó la comunidad durante la batalla campal.
Hasta el momento no les han informado el sistema de pago, lo que sí es cierto es que no van a “desprenderse” del poco efectivo que les queda.
Explicaron que solo salieron a la calle a reclamar su derecho a la alimentación y en rechazo al elevado precio de la bolsa de Bs. 336 mil en efectivo, por la compra de 4 kilos de harina Pan, 1 kilo de arroz, 1 kilo de pasta, 1 kilo de azúcar y 1 litro de aceite.
Sin embargo, la mañana de ayer comenzaron a llegar los camiones cargados con los alimentos para armar las bolsas. Aunque se intentó conseguir la versión del CLAP no fue posible.
“Una representante del consejo comunal nos dijo que estaban buscando la manera de que habiliten un punto de venta para pagar con tarjeta. Reunir Bs. 336 mil no es fácil y los bancos solo están Bs. 10 mil diario y el dinero no rinde”, dijo Lino Donqui.
Destacó que los vecinos se molestaron al ver la grotesca actitud con la que los funcionarios llegaron al sitio. “Se bajaron de sus vehículos y comenzaron a accionar sus armas como si nosotros fuésemos delincuentes. Simplemente estábamos reclamando nuestro derecho y nos molestó fue los policías no preguntaron qué pasaba”.
Rigoberto Casto apuntó que “el monstruo que creó el Gobierno fue el que salió a la calle a protestar. Se llevaron a varios detenidos. Esa bolsa no trajo nada y para colmo con eso hay que sobrevivir durante un mes. El precio que tiene es demasiado elevado, casi iguala a un salario mínimo.”, exclamó.
Otro foco de protesta se registró en el casco de La Guiara, a escasos metros de la Panadería Flor de Pachano, donde también estaban los Guardias Nacionales con equipos antimotines.
“Se vivieron muchos momentos de angustia, porque los policías nos veían con cara de odio, como si nosotros tuviésemos la culpa de la situación. El precio de la bolsa es muy alto y nuestro poder adquisitivo no nos da para comprarla, tendré que pedir dinero prestado, aunque en esta situación es bastante difícil”, manifestó Enriqueta Ramos, madre de cuatro menores./LB