César Hernández rebosa confianza
* El segunda base criollo es una las razones del buen momento de los Filis
Para la gente que tiene muchos años en el béisbol, muchas veces los peloteros pareciesen sus propios hijos. Crecen frente a sus ojos, más rápido de lo que parece posible.
El venezolano César Hernández es uno de esos muchachos para el manager de los Filis, Pete Mackanin, quien recuerda haber visto al infielder cuando éste era un adolescente abriéndose paso en las ligas menores.
«César era tímido, sin mucha confianza en sí mismo. Tenía habilidades, pero no confianza», contó Mackanin. «Lo he visto crecer a lo largo de los años, hasta convertirse en un sólido pelotero de Grandes Ligas. Le tomó un buen tiempo jugar con la confianza con la que está jugando ahora».
Hernández, un segunda base que batea de primero en el orden ofensivo, es una de las principales razones por las que los Filis han arrancado mejor de lo esperado en 2017.
El valenciano llegó a la jornada de ayer bateando para .321, jugando una defensa de élite y manejándose como alguien que tiene planes de quedarse en las Grandes Ligas.
Hernández se apoderó de la segunda base en 2015, después de que el ícono de la franquicia, Chase Utley, fue cambiado a los Dodgers. Nadie sabía cuánto tiempo duraría Hernández como dueño de la posición, sobre todo porque en su juego había varias cosas por mejorar.
En un principio, era un defensor por debajo del promedio y no era un buen corredor. Pero el camarero, quien cumplirá 27 años a finales de mayo, se ha convertido en un potencial pelotero del Juego de Estrellas que está aportando de todas las formas posibles. Y su defensa, de acuerdo a distintas métricas, ha estado este año entre las mejores de ambas ligas.