Venezolanos eligen Panamá para poner en práctica sus profesiones
Con una carga de indignación, frustración y mucha tristeza, Evelyng Matheus, graduada en ingeniería industrial y con un técnico superior en informática, se marcha para Panamá a trabajar, porque lo considera adecuado para poner en práctica su profesión.
Aunque no llegará ejerciendo su carrera, comenzará como instructora de un gimnasio, función que le permitirá gozar de un ingreso adecuado para cubrir todos sus gastos. Esta profesional, que deja a su hijo de siete años con su madre, asegura que piensa regresar a buscarlo.
“Lo que me motiva a irme y dejar a mi familia, es la situación del país, la falta de empleo, las colas para comprar comida y el constante incremento en el costo de la vida”.
Afirma que se marcha, pero regresará a buscar a ese pedacito de ella que tuvo que dejar por no contar con la estabilidad necesaria para un niño. “Una vez que tenga la posibilidad de llevarme a mi hijo, lo vengo a buscar, porque esta Venezuela no es la que quiero para su futuro”.
Con mucha esperanza en su rostro, dice que hará el sacrificio necesario para retornar en diciembre y ejercer su derecho al voto, porque afirma que “no hay mal que dure 100 años. Me voy de mi país, pero es aquí donde quiero ver crecer a mi hijo, no en el extranjero. Así que vendré cuando podamos estar tranquilos en esta tierra tan rica en recursos”.
Matheus no se va sola, con ella viaja Darwin Murillo, un ingeniero electricista, que consiguió empleo como asistente de electricidad en una compañía que le dio la oportunidad de aplicar sus conocimientos en un puesto muy por debajo de lo que podría desempeñar como profesional. Sin embargo, el ingreso semanal le garantiza una estabilidad que en Venezuela no conseguirá ni en un cargo de su carrera. “Causa mucha impotencia e indignación irme a otras tierras a buscar futuro cuando mis abuelos recibieron a muchos inmigrantes”./WMA/ep