Controles de compra en la red pública no mejoran el abastecimiento
*Las amas de casa aseguran que hacen el mercado “sujetas a la suerte”
María Elena Moreno; [email protected] – La regulación con captahuellas y terminal de cédula parecen no ser suficientes para devolver los productos básicos a los anaqueles de la red pública de alimentos, además se rompió la promesa de eliminar las colas. Las amas de casa varguenses denuncian que los despachos se hacen solo los primeros días de la semana, y cuando llegan el jueves o el viernes, los estantes están vacíos.
Califican las compras de productos básicos como una práctica sujeta a la suerte, donde se abastece solo a un grupo de personas, mientras el resto sigue en las mismas.
“Se mantiene la cola y la cacería de productos. Continuamos pasando largas horas bajo el sol. He llegado aquí a las 7:00 de la mañana y entré casi al mediodía, comprando incompleto, de paso”, destaca Belkis Betancourt, usuaria del Mercal de La Zorra.
No priorizan cola de tercera edad y discapacitados
Por su parte, Marta Gutiérrez, señala que siguen los abusos hacia los adultos mayores. “Fácilmente se nos puede bajar la tensión. Pasan los amigos, mientras que nosotros quedamos para el final. Es injusto que ese sea el trato para con los usuarios”.
Maritza Usteriz asegura que ha hecho cola en estos centros públicos, hasta las 5:00 de la tarde. “Sigue la escasez, uno debe hacer la cola a ver qué consigue, pero termina completando el mercado en otro lugar, pagando de más. Aunque controlen, deben aumentar el abastecimiento”.
Tampoco hay bolsas
Como si fuera poco, los usuarios deben comprar sus bolsas pues en los módulos no hay, así como tampoco hay leche en polvo, café o carne. Otra de las quejas, es la restricción que catalogan de “exagerada”.
“Cómo van a vender solo dos unidades por semana de cada artículo. En mi casa somos muchas personas, dos kilos de arroz no rinden para los siete días”, agrega Betancourt. /MEM/ep