Aumentan las enfermedades dentales en niños por la malnutrición
De preocupante calificó la doctora Radolka Penoth, odontóloga del Centro Médico Diagnóstico Gamma de La Guaira, el alto índice de caries en la población infantil por una alimentación rica en azúcares y baja en nutrientes.
“Una consulta a temprana es lo primordial. A partir de los 2 años de edad debemos llevar a los niños a la primera cita con el odontólogo porque ya tienen sus 20 dientes. Deben mantener una buena higiene bucal, cepillarse tres veces al día o después de cada comida y usar enjuague bucal e hilo dental para los más grandes”.
Recalcó que en el caso de los niños, entre 2 y 5 años, los padres deben estar al pendiente de la higiene bucal y asistirlo siempre que sea necesario.
“El cepillo debemos cambiarlo cada tres meses, porque según la OMS tenemos una gran cantidad de flora bacteriana en la boca”.
La especialistas dijo que es vital reducir la ingesta de azúcar y carbohidratos e incluir más frutas en la dieta, porque la caries no solo lleva a la pérdida de la pieza dental, sino a la aparición de infecciones.
Estos absceso pueden llegar al hueso y de allí la bacteria migra fácilmente hasta el sistema linfático. La persona corre el riesgo de sufrir una endocarditis bacteriana.
Comentó que no solo el factor económico influye en no gozar de una buena dentadura, también la falta de cuidado porque las madres por su trabajo no están pendientes de la higiene bucal de sus hijos.
La piorrea en adultos mayores
“En los adultos las más comunes son las enfermedades periodontales, conocidas antiguamente como piorrea. Es la acumulación del cálculo dental en la cara de los dientes, que afloja la raíz y provoca un absceso con la pérdida del diente y sangrado. Sobre todo en adultos mayores”.
Por eso la importancia de visitar al odontólogo cada seis meses, porque en las consultas se detectarán enfermedades como caries y gingivitis.
Señaló que hay recetas caseras como el bicarbonato para eliminar las bacterias. Pero, solo dos veces a la semana y preferiblemente diluido en agua para hacer enjuague bucal porque en exceso puede ser perjudicial para el esmalte de los dientes./jd