Se debe capacitar al personal que atiende los casos de abuso

Los casos de pedofilia a nivel regional y nacional son preocupantes, porque solo en lo que va de 2022, el Ministerio Público ha atendido 718 casos de abuso infantil, según la información difundida por el fiscal general, Tarek William Saab.

Por esta razón, es preciso resaltar que se debería contar con un equipo multidisciplinario que atienda correctamente a las víctimas de abuso.

“Actualmente no se cumplen con los protocolos, solamente se inaugura instalaciones y se designan efectivos, pero no se van actualizando acorde a los cambios de la sociedad. Eso tiene que ser una formación continua”, explicó Luis Soto, comisionado jubilado de la Policía de La Guaira.

Destacó que las autoridades de las instituciones policiales deben dar el primer paso para reactivar una unidad de seguimiento a los casos de abuso infantil, formando e integrando personal altamente capacitado, certificado y profesional.

“Los funcionarios deben ser abiertos a dar soluciones, de un temperamento acorde, que sepa entender y no estigmatice de entrada a la víctima”.

Tomó como ejemplo al personal de seguridad aeronáutica que labora en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía. “Ellos en cada momento que se presenta un incidente tienen que generar una nueva resolución que incluye al protocolo básico. Así debe ser la formación de los funcionarios que están en atención directa a la víctima y más si son niños”, dijo.

Es un tema de salud pública Soto explicó que la alta cantidad de casos de pedofilia ya se puede catalogar como un problema de salud pública que debe ser atendido en hospitales por médicos, psicólogos, psiquiatras.

“Quienes están al frente de las instituciones policiales debemos remar en la misma dirección, se requiere que el Estado quiera erradicar la violencia hacia los niños. Hay que hacer un esfuerzo en conjunto con los militares, el jefe de la Zona Educativa”, comentó.

Finalmente, hizo un llamado a todos los funcionarios policiales para que ayuden a dar solución a esta problemática.

“El Código Orgánico Procesal Penal es un excelente instructivo para la función policial, pero esa no es toda la solución, también está en los policías conocer la importancia de su aporte a la sociedad, tenemos que saberlo transmitir para ser respetados. No es solo portar un uniforme y estar en un comando sino saber atender a la víctima y orientarla”.

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