Papa: Antisemitismo en Europa es una mecha que hay que apagar
El papa Francisco comenzó en Budapest un viaje de cuatro días por Europa Central, donde advirtió de los brotes de odio y antisemitismo que surgen en Europa y otros lugares en el encuentro que mantuvo con líderes cristianos y judíos en su primer acto de la visita a la capital húngara, donde sólo permaneció siete horas para oficiar la misa de clausura del Congreso Ecuménico.
«La amenaza del antisemitismo que todavía serpentea en Europa y en otros lugares y es una mecha que hay que apagar. La mejor forma de desactivarla es trabajar en positivo juntos, promover la fraternidad», agregó el argentino, firme defensor del diálogo interreligioso.
«Ustedes, judíos y cristianos, desean ver en el otro ya no un extraño, sino un amigo; ya no un adversario, sino un hermano», consideró, aludiendo al destino trágico del poeta húngaro Miklos Radnoti, muerto en un campo de concentración.
Francisco se reunió con los representantes cristianos, que suponen el 52% de la población y de los que el 30% son católicos, y con la comunidad judía fuertemente diezmada durante la invasión nazi.
Francisco aseguró que Dios pide a cristianos y judíos que dejen «atrás las incomprensiones del pasado, las pretensiones de tener razón y de culpar a los demás, para ponernos en camino hacia su promesa de paz».
Además, exhortó a que esta unión sea fuerte ante la tentación de «absorber al otro», porque cuando se ha intentado «no se ha construido, se ha destruido» y «lo mismo cuando se ha querido marginarlo en un gueto, en vez de integrarlo».