“Con el pago de la tablita salarial y el aumento del 15% en el mes de febrero, podemos decir que el Concejo Municipal ha dado inicio a la cancelación de las deudas contractuales”, explica Vladimir Narváez, secretario general del Sindicato Bolivariano de trabajadores del Concejo Municipal.
Resalta que aún les adeudan a los empleados contratados el ajuste salarial de mayo 2013 y 2014, mientras que los fijos esperan por pagos del año pasado.
Por su parte, Héctor Ramírez indica que falta ajustar el bono de alimentación a la unidad tributaria.
Los dirigentes sindicales sostienen que hay buena disposición por parte de la directiva. Las reuniones son constantes en aras de buscar soluciones. BR/ep