Los consumidores han disminuido la cantidad de productos de aseo personal: si llevan el champú no compran la crema corporal, porque el salario no les alcanza. Además han tenido que aceptar la escasa variedad de marcas tradicionales y la aparición de un sinfín de otras desconocidas.
Todos aseguran que les ha tocado «estirar los productos». Los precios varían según la marca del producto, el champú Every Nigt está entre $3,41 y $3,11 y el Elvive $7. Mientras que el acondicionador de la misma marca tiene un precio marcado de $3,70.
El tratamiento capilar de Drene es uno de los más costosos: Se consigue a partir de $4,71. A la lista se suma los desodorantes: Lady Speed Stick, Rexona, Suave, Dove que no bajan de $5,91.
En la vitrinas se exhiben varias marcas desconocidas de toallas sanitarias Care Soft en $0,80 de 9 unidades; Friends de 10 en $1,30 y Sensual en $0,50. Quedaron en la niebla de los tiempos los Kotex, Always y otras.
Por la pasta dental Galactic los consumidores deben pagar $0,75 y por la Colgate $1,54. Les ha tocado desembolsar un poco más dinero por el papel higiénico que cuesta hasta $2.
Un vendedor de un comercio ubicado en Maiquetía, que optó por el anonimato, indicó quelos precios suben con frecuencia. Sin embargo, asegura que la venta se ha mantenido, quizás no como en años anteriores, pero los ciudadanos hacen su esfuerzo por al menos llevarse dos productos de higiene personal. /HB