Compromiso, esa es la primera palabra que le viene a Omar Vizquel cuando contempla a los jugadores que de manera voluntaria están participando en entrenamientos informales rumbo al Clásico Mundial de Beisbol en el terreno de la Universidad Internacional de la Florida.
Venezuela ha sido una de las grandes animadoras de las ediciones pasadas, pero a pesar de su cúmulo de estrellas siempre ha quedado a deber dentro de las grandes potencias del área latinoamericana.
«Hoy estamos aquí gracias a la misma iniciativa de los peloteros que han puesto de su parte», expresó Vizquel, manager de la escuadra vinotinto.
«No es bueno que Grandes Ligas ponga tanta restricciones para que los peloteros se junten y practiquen. Ellos mismos se pusieron de acuerdo mediante las redes sociales y por eso están aquí», agregó.
Encabezados por Miguel Cabrera, más de 20 peloteros venezolanos llevan días realizando rutinas de prácticas que durarán hasta el domingo, cuando tendrán que acudir a sus respectivos Campamentos de Primavera.
Los elegidos para acudir al Clásico volverán a reunirse a principios de marzo para poner a punto los equipos y celebrar al menos dos encuentros de preparación antes de iniciar el torneo de manera oficial.
«Tenemos bastante talento en este clubhouse», afirmó José Altuve. «Esta es una selección que tiene de todo: poder, pitcheo, velocidad, defensa. Estar aquí nos va ayudar en la química, nos vamos a relacionar más. Solo hablamos de jugar y ganar. Es muy importante estar aquí en estos días. Tenemos un compromiso con el país, con nuestros fanáticos».
En esta agrupación informal también sobresalen, junto a Cabrera, figuras de la talla de Altuve, Félix Hernández, Pablo Sandoval, Asdrúbal Cabrera, Martín Prado y Víctor Martínez.
«Para no ser un entrenamiento oficial, esta ha sido una iniciativa muy bonita», apuntó Martínez. «Este equipo conjuga experiencia y juventud. El Clásico es un evento difícil, porque en marzo es cuando nos estamos poniendo en forma. Algunos equipos como Estados Unidos tratan el Clásico como si fuera un Spring Training. No se puede tapar el sol con un dedo».