Autoridades venezolanas pidieron a Trinidad y Tobago una investigación “exhaustiva” para “esclarecer los hechos” en los que murió un bebé, luego de que la Guardia Costera de ese país abriese fuego contra una embarcación con migrantes.
“El Gobierno venezolano extiende sus más sinceras condolencias a los familiares del infante, al tiempo que exhorta a las autoridades de Trinidad y Tobago a realizar una investigación exhaustiva que permita esclarecer los hechos en torno a este fatal incidente en el que, lamentablemente, perdió la vida un niño venezolano”, indicó un comunicado del Ministerio de Exteriores.
Caracas “expresa su más profundo pesar y rechazo ante el incidente ocurrido la noche del sábado en aguas territoriales de Trinidad y Tobago, en el cual la Guardia Costera del vecino país habría abierto fuego contra una embarcación en la que viajaban 43 personas”.
La Cancillería venezolana señaló que activará “los protocolos binacionales necesarios para consolidar la dinámica de seguridad transfronteriza que preserve el buen entendimiento” entre ambos países.
El bebé murió en brazos de su madre, Darielvis Sarabia, durante maniobras de la Guardia Costera de Trinidad y Tobago para interceptar la embarcación en la que viajaban. Sarabia también sufrió heridas de bala y fue trasladada al Sangre Grande Hospital de la isla.
Según las autoridades trinitenses, la embarcación procedente de Venezuela se negó a detenerse ante una voz de alto, por lo que agentes de la Guardia Costera hicieron disparos en “defensa propia”, pues alegan que temieron por las vidas de la tripulación ante una posible “embestida”.