En los frigoríficos de Catia la Mar, la chuleta de cochino lleva un mes desaparecida. Comerciantes manifiestan que los nuevos precios fijados por el Gobierno son un golpe más para la venta de los productos cárnicos, los cuales podrían esfumarse de los establecimientos.
“Si ya estamos presentando problemas con el rubro, ahora con la regulación de su precio nos las veremos peor, informa José Figueroa, carnicero de un establecimiento en la Urbanización La Atlántida.
El vicepresidente de la República, Jorge Arreaza, anunció que los nuevos precios fijados dejan el pernil en Bs. 585,95 el kilo, el lomo en Bs. 732,44, la costilla en Bs. 527,36, la chuleta a Bs. 669,74, la paleta en Bs. 427,16 y el tocino en Bs. 239,80; mientras que el cerdo de canal a puerta de corral en Bs. 240.
Aún cuando la regulación no había aparecido en Gaceta Oficial, ya se había hecho el anuncio, muchos consumidores acudieron a los comercios en busca del rubro temiendo que éste desaparezca. “Ya la gente sabe que la regulación de alimento desencadena escasez”.
Solo hay chuleta ahumada
En los frigoríficos visitados se constató que aún ofrecen chuleta ahumada a Bs. 1.500 el kilo. “Los despachos de este tipo de carne nos llegan cada quince días. Hasta ahora no hemos presentado fallas con su distribución, aunque su precio se ha incrementado, se continúa vendiendo”, indica Figueroa.
La chuleta continúa llegando a las neveras de las carnicerías, pero no con la misma frecuencia que antes./WMA/ep