Amy Torres, amytorreslaverdad@gmail.com.- De acuerdo con información aportada por una fuente del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), a las 6:00 am dos sujetos hicieron frente a una comisión de dicho cuerpo y emprendieron la huida, cuando los pesquisas realizaban labores de averiguación en las residencias Martín Vegas, en el barrio Ezequiel Zamora.
Ambos corrieron hacia dos residencias distintas, y en una de ellas se produjo otro enfrentamiento en el que cayó herido un adolescente de 15 años de edad, que fue trasladado al Hospitalito de Catia la Mar, donde falleció luego de su ingreso.
En el lugar se incautó un arma de fuego sin marca ni modelo aparente, calibre 38 mm, contentiva de tres conchas percutidas y tres balas sin percutir del mismo calibre; y dos conchas de balas percutidas calibre 9 mm, con tres proyectiles deformados.
El otro detenido durante el procedimiento, a cargo del Eje Contra Homicidios de la policía científica, fue un jovencito de 17 años, señalado junto al quinceañero como los responsables de la muerte de Henrry Liendo (39), mensajero de la Gobernación, ocurrida a las 7:30 am del pasado martes.
Comunidad denuncia atropellos y clama justicia
Unas 30 familias del bloque 4 de Martín Vegas relataron de manera anónima que el quinceañero fue ajusticiado en su propio cuarto. “A las 4:30 am me desperté por la bulla y cuando salí a ver qué pasaba me encontré con más de 20 petejotas, que al verme me apuntaron y me gritaron que me metiera”, relató una vecina.
Otra contó que vio a los funcionarios cuando violentaban la cerradura de la casa del adolescente, de donde sacaron a su papá, mamá, hermana, sobrinos de 1, 3 y seis años, y hasta a la novia; todos en ropa interior.
“¿Si de verdad fuera un delincuente, crees que toda una comunidad saldría a apoyarlo? Pues no. A él lo que le gustaban eran las mujeres. Estudiaba 2do año en la Armando Reverón y jugaba beisbol en Santa Marta. Incluso pronto lo iba a firmar una academia de béisbol”, expresó otra residente del lugar.
Testigos del hecho mencionaron que los efectivos impusieron toque de queda en el urbanismo, al punto que hubo gente que ni siquiera pudo salir a trabajar. “Aquí todos vimos lo que ocurrió, a pesar de las amenazas que recibimos. Escuchamos solo dos disparos y luego varios martillazos”.
Un familiar del joven refirió que los uniformados se quedaron a solas con el quinceañero y después se escucharon las detonaciones. “Vimos cuando, incluso, martillaron marcas de impactos de balas en varios puntos de la casa. También aprovecharon para llevarse papel higiénico, harina Pan, jabón, así como los celulares y las prendas de mi mamá. Lo peor es que ni siquiera vinieron con un fiscal. Se violó todo el proceso. No hubo ningún enfrentamiento”.
Los habitantes indicaron, igualmente, que del bloque se llevaron detenidos a cuatro muchachos, y a la hermana de uno de estos, que pretendió irse en su carro detrás de la patrulla para conocer a dónde los trasladarían./ar