Luisana Brito, luisanablaverdad@gmail.com.- Después de nueve días de haber iniciado la limpieza del río San Julián, en Caraballeda, la Constructora Manhattan C.A., empresa encargada de los trabajos, activó una trocha de acceso hasta la desembocadura para evitar que las aguas se desborden, informó la ingeniera geóloga del Equipo Interdisciplinario Apoyo a San Julián, Mariela Gómez Abreu.
Explicó que esta es una medida preventiva ante la cercanía de la temporada de lluvias, pues deben garantizar la salida del caudal y de los sedimentos que podrían bajar por efecto de la presión del agua.
“La trocha presenta un 40% de avance y en este momento sirve para el paso de los vehículos de carga pesada. Los sedimentos estancados forman una terraza fluvial de 1.603 metros cúbicos que abarcan desde el puente de la avenida La Costanera y continúa aguas abajo; una zona completamente pantanosa que se desarrolla hasta detrás de la Calle del hambre”.
Debajo del puente los desechos alcanzan los dos metros y solo faltarían 2.04 metros más para llegar al tope de la pasarela. “Menos mal que comenzamos porque si no el agua se podría salir y represarse en la parte alta. Ese es el apuro que teníamos porque eso nos expondría a un desbordamiento como el que sucedió aquel trágico diciembre del año 1999”, dijo.
De tal manera que para tener mayor efectividad en la limpieza, están agilizando la construcción de otro camino por detrás de playa Carrilito hasta la desembocadura, sin embargo en plena ejecución se les dañó una de las maquinarias.
“Tuvimos que buscar un jumbo al día siguiente para avanzar. No tenemos un tiempo estimado para la culminación de la obra porque todo va a depender de la fluidez o de los obstáculos que vayamos encontrando”.
Una de las recomendaciones que hizo Gómez fue que cada uno de los consejos comunales adyacentes al afluente “ejerzan contraloría social para que no haya impacto ambiental y si se presenta, sepan como aminorarlo”, enfatizó la ingeniera.LB/jd