Trinidad califica de “apropiada” la acción contra bote venezolano
El primer ministro de Trinidad y Tobago, Keith Rowley, rechazó este viernes que se califique como asesinato la muerte del bebé venezolano, que fue alcanzado por una bala cuando la Guardia Costera disparó en contra de un bote con más de 20 migrantes.
“Esa acción fue legal, esa acción fue apropiada para defender a Trinidad y Tobago, y resultó en la muerte de ese niño y en ser llamados asesinos (los efectivos de la Guardia Costera). Lo rechazo, lo rechazo, y lo rechazo”, expresó en declaraciones ante los medios de comunicación.
Aseguró que hasta el momento desconoce la identidad del oficial que apretó el gatillo. “Pero, sé que ese oficial siente el dolor de saber que ese fue el resultado de esa acción”, añadió.
“Defensa propia”
La Guardia Costera de Trinidad y Tobago publicó un comunicado en el que reconoció que disparó, la noche del sábado, contra un bote que transportaba a venezolanos y mató a un niño que migraba junto a su madre.
Explican que dispararon al motor de la lancha en un intento de detenerlos y en “defensa propia”, alegando que los migrantes habían intentado “embestirlos”.
Los funcionarios argumentaron que durante el procedimiento “utilizaron todos los métodos disponibles, incluido el uso del megáfono, la bocina del barco, el reflector y las bengalas, para tratar de detener la embarcación sospechosa. Sin embargo, intentaron evadir” a las autoridades.
Agregó que tras inspeccionar el bote “descubrieron” que había “migrantes ilegales” a bordo, que habían permanecido “escondidos” y no los habían visto antes.