Agotadas en más del 70% se mantienen las medicinas antineoplásicas utilizadas para el tratamiento de quimioterapia en pacientes con cáncer, en la farmacia de alto costo del Seguro Social de La Guaira.
“Tengo la quimioterapia paralizada desde diciembre porque no consigo el Avastin. Todos los miércoles vengo a ver si llegó mi kit y siempre salgo con las manos vacías”, señaló Federica Yépez, paciente con cáncer de mama.
Yamilet Niño, tiene tres meses sin tomar el Anastrozol, una hormonoterapia que deben cumplir por cinco años quienes han sido operadas de cáncer metastásico de mamas.
“Es preocupante la situación pues el oncólogo me ha dicho que el tratamiento debe ser ininterrumpido para evitar la reaparición de nuevas células cancerígenas”.
La falta de medicinas especiales se mantiene a nivel nacional, al punto que la Sociedad Venezolana de Salud Pública y la Red Defendamos la Epidemiología Nacional divulgaron un comunicado en el que revelan que más de 30 medicamentos antineoplásicos se mantienen agotados en el país.
Aseguraron que la intención del comunicado es “que los interesados tomen sus precauciones, a los fines de no descontinuar los tratamiento de quimioterapia o planificar alternativas terapéuticas dirigidas por sus médicos”.
Sin embargo, son pocos los privilegiados que pueden encargar sus fármacos al extranjero. La única opción de esperanza, cuando no llega nada a las farmacias del Seguro Social, es Badam que también presenta un desabastecimiento de más del 80% en medicinas de alto costo.