Un conductor de gandola, que reside en Petare y trabaja en el Puerto de La Guaira, revela que para llenar el tanque, si es pequeño, se pagan $10 y por cada uno de los tanques grandes son $20.
«Aquí todos lo pagan o se van con sus 100 litros chucutos que solo les permite llegar un poco más allá de Caracas».
Dijo que ha tenido que pernoctar en las bombas para hacer dos fletes a la semana. «El puerto de La Guaira es uno de los pocos que está generando algo de trabajo».
Reiteró que es lamentable el negocio redondo en las bombas en detrimento del chofer.
Asimismo se mantenían en cola más de 10 buses rojitos, que hacían su cola en la bomba por 50 litros, mientras sus pasajeros los esperaban en la cola en las paradas.