“Solo dieciséis pasajeros pueden abordar la unidad de transporte público, sin embargo el ingreso de dos se quedan con el fiscal y el de uno es para el terminal, esto significa que solo trabajamos con 13 pasajeros, luego de esta restricción en Vargas. Para nosotros no es rentable y la mayoría opta por no salir a trabajar”, informó Francisco Quevedo, presidente de Línea de Marapa.
Comentó que el vehículo puede estar operativo, pero si en 15 días se accidenta, no tendrán como repararlo, por lo que es preferible no sacarlo a trabajar.
Asimismo se refirió al acoso con las multas. “El chofer debe usar tapaboca, guantes, gel para los pasajeros. Eso está bien, pero los policías buscan de aplícarte la multa de dos millones si un pasajero no usa el tapaboca correctamente o se para a pedir parada y el funcionario lo fotografía como si viniera parado en el carro”.
Alega que no tienen derecho a la defensa aunque los funcionarios te lo indiquen cuando te hacen la multa de dos millones de bolívares. “Los choferes somos lo cajeros automáticos y los funcionarios tienen la tarjeta y la clave”, comentó.
Luis López