Luis López.- “La situación es grave y tiende a empeorar. A más tardar en septiembre no estaremos en capacidad de movilizar carga, esto significa que estaremos prácticamente en quiebra”, expresó Emidio Palumbo, presidente de la Cámara de Transporte Pesado.
Comentó que Fontur está por entregarle 10 cauchos a cada transporte, pero eso representa solo el 10% de lo que necesita el gremio para solventar el déficit de cauchos, cuyo valor en el mercado negro está por los 200 mil bolívares.
Agregó que un repuesto, que en enero tenía un precio de 25 mil bolívares, a esta fecha está en 250 mil bolívares, eso significa un incremento de hasta 1000% difícil de sostener.
Aclaró que siguen cobrando fletes de miseria, porque el poco trabajo que tienen lo hacen con empresas del Gobierno que les quitan el 20% de comisión por cada flete.
“Solicitamos al Ministerio de Comercio que nos permita formar parte del Registro Nacional de Empresas para los cobros directamente al estado, pero los trámites burocráticos han hecho imposible que se concrete. “Nos permitiría paliar los gastos al realizar nosotros los cobros y no a terceros, que nos arrebatan los pocos ingresos que estamos percibiendo”.
Inseguridad en las vías
Informó Palumbo que dos de sus gandolas han sido objeto de robo. “De noche es imposible transitar. Lanzan en la vía los llamados “miguelitos” y hasta les disparan directamente a los parabrisas para obligar al conductor a detenerse y saquear la gandola”.
Comentó que entre la falta de trabajo, repuestos caros, robos y saqueos en las vías, el gremio está sobreviviendo.
“De mantenerse esta situación entre septiembre y octubre estaremos imposibilitados de trabajar. Pareciera que hay interés en quebrar al transporte pesado”./jd