Tragedia acabó con la estructura de cuatro escuelas
María Lourdes Arráez.- La gran mayoría de las escuelas entre Caruao y Catia la Mar se vieron afectadas por el barro, y las que quedaron en pie sirvieron de refugio para los miles de damnificados. El deslave de 1999 arrasó con las estructuras de las escuelas públicas Hilda Vásquez y Corapal de Caraballeda, Los Caracas en Carmen de Uria y Francisco Lazo Martí en Anare, detalló el profesor Raúl Yemiñame.
“Otras estructuras también se vieron gravemente afectadas, por ejemplo las columnas de la escuela República de Panamá se terminaron de deteriorar y debieron desalojar las instalaciones”.
Ejemplo de solidaridad
Todos, como una gran familia, se dedicaron a dar apoyo a las instituciones afectadas por las lluvias. Docentes y estudiantes encontraron espacios donde realizar sus actividades académicas y poder retomar sus vidas, para minimizar los recuerdos de esos días cuando la montaña bajó al mar.
La profesora Rosa Elena Marcano, comentó que trabajaba en la República de El Salvador, donde se reubicaron los docentes y estudiantes de la República de Panamá, “después de la tragedia se dividieron los espacios y horarios para que funcionaran las dos instituciones, mientras que en el auditorio ubicaron a un grupo de damnificados”.
Recuperación psicosocial
Luego del desastre, en las escuelas y liceos se aplicó una metodología de atención psicosocial a niños, niñas, adolescentes y sus familias, diseñada por el Ministerio de Educación, a través de la cual se fomentaban actividades para favorecer la integración familiar, escolar y comunitaria, se buscaba restaurar el equilibrio perdido.
Los niños afectados participaron en diversas labores para facilitar la “descarga emocional” con juegos, escritos, dibujos, sociodrama, títeres y cuentos, que les permitieron la resignificación simbólica y emocional de lo ocurrido.
USB Litoral no soportó las aguas
El núcleo del Litoral de la Universidad Simón Bolívar (USB) recibió 200 damnificados en la Casa del Empleado. El río Camurí Grande afectó gran parte del valle, por lo que la comunidad universitaria debió ser reubicada en Sartenejas./ar