Luisana Brito, luisanablaverad@gmail.com.- Además de tener más de un mes sin el servicio de agua por tuberías, vecinos de La Páez, en Catia la Mar, debieron sumarle 26 horas más de sequía, debido a los trabajos de reparación de fugas en las tuberías y la eliminación de tomas ilegales en el Sistema de Producción Tuy 3.
Explicaron que estas medidas reducen las posibilidades de que les manden el vital líquido en los próximos días. Esta situación les obliga a pagar grandes cantidades de dinero por el alquiler de camiones privados, pues aseguran que la Gobernación les prometió el envío de cuatro cisternas y nunca llegaron.
“Tenemos un mes sin agua, y hace 15 días nos mandaron un poquito en la noche. No duró ni cuatro horas. Los tanques se quedaron vacío, porque no llega con fuerza. Nosotros lo que necesitamos es agua. Nuestra calidad de vida no es la misma en comparación con otros años. Estamos regresando a la época antigua, cuando nos bañábamos con tobitos”, dijo Gladys Carbajal, habitante del Bloque 2.
Indicó que para poder pagar los camiones, tienen que ponerse de acuerdo varias familias. “Por un tanque de mil litros nos están cobrando tres mil bolívares, y esa cantidad es muy difícil de pagar. Nos unimos para darlos, pero no alcanza el agua”.
Hizo un llamado a la junta de condominio, para que supervise los tanques que están en la azotea. “Muchas veces los que viven en los pisos altos pegan sus mangueras y el agua les baja por gravedad, mientras que nosotros, los de planta baja, nos quedamos secos, y ahora, vamos a pasar más tiempo con este racionamiento”.
Destacó que todas las semanas manda su ropa a la tintorería. “No puedo utilizar el agua del tanque para lavar, porque mi lavadora es automática y utiliza muchos litros. Sin embargo, solo mando la lencería y la ropa diaria, porque por cada tanda me cobran trescientos bolívares”.
Para cocinar se ven en la necesidad de comprar frascos de agua mineral. “A veces nos lo venden en doscientos bolívares y otras en doscientos cincuenta. El ascensor está dañado, y hay que pagarle a alguien para que los suba. Lo que estamos viviendo es una calamidad”. LB/ mp