Luisana Brito.- En Los Corales, en Caraballeda, los habitantes de las calles 20 a la 24 tienen dos años esperando que Hidrocapital culmine las conexiones de tubos y mangueras para abastecer de agua a la comunidad, situación que les obliga a cargar el preciado líquido desde el río San Julián.
Alberto Fernández explica que en el año 2014, la hidrológica inició los trabajos de mantenimiento en el pozo, ubicado en la calle 21, y hasta la fecha no han culminado el proyecto.
Asegura que en una primera fase, aprobaron doscientos millones de bolívares.
“Los ingenieros vienen cuando hacemos el reclamo vía telefónica, de resto no nos toman en cuenta. Ese es un pozo que tiene 150 metros de profundidad, y no le hemos podido dar uso”, afirmó Fernández.
Margarita Benales señala que por el deterioro de las vías, son pocas las cisternas que prestan el servicio, y las que acceden les cobran hasta siete mil bolívares. “Si no vienen las cisternas, tenemos que irnos para el río. Aquí hay niños con diarrea, vómitos y amibiasis, porque las aguas están contaminadas”. LB/ mp