La Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP), y los equipos que la integran, informaron que debido a varios factores externos la temporada 2020-21 aún no tiene fecha de inicio.
“A escasos meses para lo que sería la jornada inaugural de la zafra 2020-2021, tenemos el deber de manifestar muy responsablemente que el montaje del evento favorito y más esperado del pueblo venezolano se hace cada vez más complejo.”, reza el comunicado publicado este martes.
Señalan que aún se mantienen los “esfuerzos” para restablecer el orden jurídico de los equipos Tigres de Aragua y Navegantes del Magallanes, ante la Confederación de Béisbol Profesional del Caribe (CBPC) y la Major League Baseball (MLB). Ambas novenas están señaladas de estar vinculadas con la administración del presidente Nicolás Maduro, y las Grandes Ligas exigió a toda su estructura que dejaran de hacer negocios con cualquier organismo vinculado al oficialismo para evitar ser sancionadas por la administración de Donald Trump.
Además, factores que lamentablemente la LVBP no controla, como la incertidumbre en un restablecimiento normalizado de vuelos internacionales, así como el ascenso de contagios por el virus trastoca la certidumbre de los días por venir.
COMUNICADO
La Liga Venezolana de Beisbol Profesional y los ocho equipos que la integran, Leones del Caracas, Tiburones de La Guaira, Tigres de Aragua, Navegantes del Magallanes, Cardenales de Lara, Águilas del Zulia, Caribes de Anzoátegui y Bravos de Margarita, en ocasión de informar la actual situación de cara al campeonato 2020-2021, manifiestan:
Desde el mismo momento en que se concluye una temporada, tanto la LVBP como sus divisas afiliadas inician la ardua labor de planificar un próximo torneo; así ha sido por casi 75 años de historia en los que no se ha dejado de escuchar la voz de play ball en las jornadas inaugurales. Sin embargo, desde que se declaró la emergencia nacional sanitaria, debido a la aparición del Covid-19, virus al cual nuestro país como el resto del mundo no escapa de su amenaza, se ha afectado seriamente el normal desenvolvimiento de los procesos que se necesitan cumplir para ofrecer el acostumbrado espectáculo de calidad en las siete sedes que albergan a los equipos participantes.
Hoy están presentes factores que lamentablemente la LVBP no controla, la certeza de un restablecimiento normalizado de vuelos internacionales, así como el ascenso de contagios por el virus citado que trastoca la certidumbre de los días por venir.
Asimismo, son conocidos públicamente los esfuerzos realizados para restablecer el orden jurídico de los equipos Tigres de Aragua y Navegantes del Magallanes, según el Acuerdo de Ligas de Invierno que sostienen los circuitos miembros de la Confederación de Béisbol Profesional del Caribe (CBPC) con la Major League Baseball (MLB) -organizaciones a las que la LVBP está afiliada-; luego de solventada la situación de los otros seis equipos en diciembre de 2019. Este proceso requiere el cumplimiento de exigencias muy específicas, para así demostrar que ambas divisas pueden operar en el marco del convenio en el que deben interactuar con Major League Baseball.
El tiempo es un factor determinante para brindarle a la fanaticada venezolana una nueva temporada con el estándar al que está acostumbrado. A escasos meses para lo que sería la jornada inaugural de la zafra 2020-2021, tenemos el deber de manifestar muy responsablemente que el montaje del evento favorito y más esperado del pueblo venezolano se hace cada vez más complejo. Nuestra intención es y seguirá siendo organizar un campeonato para jugar beisbol, lo cual es nuestra razón de ser.
Estamos convencidos que superaremos estos obstáculos y nos reencontraremos más temprano que tarde en los estadios venezolanos, disfrutando de cada jugada, picheo y batazo del talento criollo en constante ascenso.
La responsabilidad y seriedad demostradas por la LVBP a lo largo de su historia, fundamento de la credibilidad, confianza y respaldo de los fanáticos del beisbol profesional desde su aparición en enero de 1946, nos obliga a tomar decisiones cónsonas con dicho papel de responsabilidad ante el espectáculo favorito de los venezolanos.