Lorena Correa, Loreclaverdad@gmail.com.- La planta termoeléctrica de Tacoa, ubicada en la comunidad de Arrecife, Carayaca, y encargada de la electricidad de Miranda, Caracas y Vargas, se ha vuelto un dolor de cabeza para los vecinos y trabajadores de la empresa, debido a que tiene más de quince años sin mantenimiento en los tanques.
Vecinos denuncian que es una bomba de tiempo y en cualquier momento puede colapsar, ocasionando una tragedia peor que la del año 1982, cuando se produjo una fuerte explosión que ocasionó pérdidas humanas y daños materiales.
Infecciones respiratorias
Oscar Esparragoza, indica que la contaminación del aire los mantiene azotados; causando afecciones respiratorias y enfermedades pulmonares producto del hollín, además le agregan la contaminación sónica; la cual en horas de la noche no les permite dormir por los ruidos molestos, así como las constantes vibraciones que están agrietando las paredes de las viviendas y temen que se derrumben en cualquier momento.
“El hollín de la planta produce alergia, seca los árboles y deteriora la ropa. Hemos hablado con el gerente, exigiéndole mantenimiento y no tenemos respuesta, han pasado quince años desde la última jornada de rehabilitación de la planta, aquí vivimos con el Dios en la boca, dormimos con un ojo cerrado y otro abierto, porque no sabemos en qué momento puede ocurrir una tragedia”.
Viviendas agrietadas
Destaca que están buscando la manera de vender sus viviendas para mudarse, puesto que ya no soportan vivir entre tanta contaminación.
“Vivimos en casas en mal estado por las vibraciones que genera la planta diariamente, además no conseguimos ni cemento para repararlas, y lo peor es que nadie se hace cargo de los daños sufridos”.
Los residentes, informaron que han realizado varias reuniones con los gerentes de la planta de Tacoa, solicitando la reparación de las áreas cercanas a la planta y no se han abocado, mientras que la vía de escape se encuentra deteriorada, con exceso de maleza y falta de iluminación, alegando que en caso de una emergencia no tendrán por dónde salir.
“Tacoa es una de las plantas del país que más produce contaminación. Aquí no respiramos aire puro, sobrevivimos con alergias, entre las contaminación sónica, la ácida y la aceitosa, que son las principales contaminaciones generadas por la planta. La falta de mantenimiento puede producir una tragedia lamentable”. LC/ar