Un total de 1.012 colombianos han sido deportados al Consulado General de Colombia tras el cierre de frontera.
A través de un contacto en el canal del Estado, los ciudadanos “se encontraban ilegal en el país”, sin embargo, aseguran que se les han respetados los derechos
En horas de la noche de este domingo, el gobernador del estado Táchira, José Gregorio Vielma Mora, afirmó también que cada uno de los colombianos han recibido “trato digno”.
“Enviados como manda la ley, sin atropellos ni torturas, en un lugar donde estaban carpas, sillas, alimentos y agua potable, se llevaron en un autobús hasta los límites de Colombia y Venezuela”.
Vielma Mora precisó que en el municipio Bolívar de la entidad una promesa del exgobernador César Pérez Vivas hizo que personas habitaran un lugar de manera ilegal que les fue concedido a cambio de votos.
“El exgobernador César Pérez Vivas le dijo a los colombianos que votaban en el país que si votaban por ellos les iban a dar una franja de terreno”, precisó el gobernador al tiempo que destacó que en el lugar “no se podía vivir”.
La autoridad regional manifestó que se había hecho un denuncia de 36 infantes que estaban sin la compañía de sus padres en la frontera venezolana, motivado a que sus progenitores se habían quedado en Colombia. “Colocamos al frente del caso al defensor del pueblo del Táchira y se verificó que lo de los 36 niños desolados era falso. Otra mentira más”, dijo.
Entretanto, precisó que no hay ninguna pareja a la que se le hayan quitado sus hijos en el sitio e indicó que las autoridades están velando por la protección del núcleo familiar.
“Estamos sacando las familias de un sector dominado por paramilitares colombianos”, puntualizó Vielma Mora.