Wilmer Martínez Añez.- wmlaverdad@gmail.com.- Antes de que inicie el periodo lluvioso es necesaria la limpieza profunda de los cauces para prevenir posibles desbordamientos, es la solicitud que hacen los habitantes de Tanaguarena.
Aunque desde instituciones regionales se han hecho trabajos de desmalezamiento y limpieza, hay ríos que aún tienen gran cantidad de escombros y tierra, por lo que vecinos claman a los entes encargados que continúen los operativos.
“Al río Tanaguarena no lo limpian desde las lluvias acaecidas durante el 2005. Hay mucha tierra, escombros y monte que con el pasar del tiempo se han acumulado”, manifiesta Peter Acosta.
Cuencas que requieren atención
De acuerdo a un recorrido realizado se pudo constatar que las cuencas de Mamo, Tacagua, Curucutí y San Julián también necesitan ser atendidas.
La de San Julián requiere mayor atención, manifiestan sus vecinos, quienes invitan a las autoridades a recordar cuando el río se salió de su cauce en la tragedia de 1999, llevándose todo lo que encontraba a su paso y dejando al sector sin los servicios básicos, que aún no han sido restituidos en todas la comunidades.
En el río Mamo, en diciembre paralizaron los trabajos de embaulamiento que se realizaban desde hace cinco años. La falla se observa en el tramo de El Piache Dos, que hasta ahora se muestra incompleto.
La quebrada Curucutí de Montesano está repleta de grandes piedras y maleza, por lo que vecinos piden el embaulamiento después de que cumplan con la limpieza.
Con relación a la de Tacagua, sus habitantes declararon que no ha recibido atención después de haber sido embaulada, poco tiempo después de la tragedia de 1999. Indican que ni siquiera han realizado operativos menores de limpieza y desmalezamiento./WMA/ar