** Alberto Pacheco asegura que solo falta amoblarlo y capacitar al personal
Luisana Brito
Agotando todas las instancias se encuentra la directiva del Sindicato Hotelero y de Turismo de Vargas para lograr la reapertura del Hotel Humboldt, ubicado en el parque El Ávila, que generaría al menos unos 400 empleos directos y más de 800 indirectos. Ya el sindicato tiene a disposición a 690 especialistas registrados.
Así lo dio a conocer Alberto Pacheco, secretario general del sindicato, quien señaló que en la última inspección realizada el pasado 26 de diciembre de 2017 pudieron constatar que solo le falta equipar y amoblar la estructura, que cuenta con 8 pisos y 7 habitaciones en cada uno.
Explicó que han entregado caratas a la Gobernación, Alcaldía, Viceministerio de Turismo, Consejo Legislativo, Cámara Municipal, Instituto de Infraestructura de Vargas y al Instituto de Turismo de Vargas, pero al parecer el tema no les interesa.
“Vemos con mucha preocupación que no han tomado en cuenta nuestras propuestas. La única institución que nos ha respaldado ha sido el Inces, que están dispuestos a colaborarnos con la capacitación del personal”.
Agregó que “lo peor es que cada día vemos como hay mayor desempleo y que un alto porcentaje puede ser recaudado a través de la promoción del turismo, pero eso no les interesa”.
Pacheco destacó que en los próximos días van a ser atendidos por los constituyentistas de Vargas para evaluar la situación. “Esperamos que de todo ello podamos obtener una respuesta para tantas inquietudes que han surgido, porque no hay justificación para tanto retraso”.
José Luis Zerpa, secretario de organización del sindicato, señaló que el hotel registra un avance significativo. “En la inspección nos dijeron que el retraso se debe a que pasaron seis contratistas, pero que ahora solo falta que le entreguen a la empresa operadora lo último que hicieron para reabrir. También vimos una casilla, suponemos que allí va a llegar el teleférico de Macuto a Caracas”.
Zerpa destacó que los trabajos en el Complejo Sheraton y Meliá están estancados. “Cada vez se ven menos obreros y sin la cantidad de manos calificadas no van a avanzar”./jd