Doriana León, dorianaleonlaverdad@gmail.com.- Entre dos y cinco accidentes cerebrovasculares (ACV) asociados con hipertensión son atendidos diariamente en las salas de emergencia de los hospitales José María Vargas de La Guaira y Periférico de Pariata. Residentes y médicos internistas hacen lo posible por resolver los casos ante la falta de neurólogos.
“Nosotros tratamos de hacer lo posible por estabilizar a los pacientes y aplicarles el tratamiento correspondiente pero en los casos donde el daño es muy elevado debemos referirlos a centros médicos en Caracas donde cuenten con neurólogos”, comentan los galenos de ambos centros de salud quienes coinciden en que al no atender al enfermo en Vargas implica un ruleteo traumático para el paciente por la falta de ambulancias y de cupos en los hospitales de la capital.
Los familiares de los pacientes con este tipo de patologías manifiestan que además de la falta de especialistas, los centros carecen de insumos y equipos especiales para la realización de estudios. “A mi hermana le dio un ACV y la han mantenido con hidratación en la sala de trauma shock. En el hospital no hay neurólogo ni Epamin o Somazina que son medicinas fundamentales para los paciente con patologías cerebrales”, comenta Xiomara Echarri.
Las tomografías, encefalogramas y otros estudios deben pagarlos en las clínicas generando un gasto inesperado al núcleo familiar. “Solo una tomografía cuesta más de 20 mil bolívares. A veces hay que repetirlas y hacer otros exámenes que representan un gasto fuerte. La familia hace el esfuerzo pero los hospitales deberían estar plenamente equipados para atender cualquier emergencia”.
Falta de antihipertensivos aumenta el riesgo
En Vargas hay un alto índice de pacientes con diabetes e hipertensión y ante la escasez de fármacos están incumpliendo sus tratamientos y llegan a las salas de trauma schok de los hospitales del estado con descompensaciones que comienzan con un síndrome coronario agudo (conocido como preinfarto) que generalmente termina en un desenlace fatal.
Los médicos aseguran que desde que comenzó el año los infartos y ACV han aumentado en más del 40% con respecto al año pasado. “Llamamos a la población a cuidarse evitando alimentos altos en carbohidratos o grasas saturadas. También les recomendamos hacer actividades al aire libre como caminar al menos 30 minutos al día para drenar el estrés y evitar los colapsos”.
En las farmacias del estado, públicas y privadas, la falta de medicamentos para pacientes hipertensos y diabéticos es constante. Esta situación los lleva a incumplir su tratamiento lo que desencadena descompensaciones metabólicas en el organismo del enfermo que pueden terminar en infartos, ACV o la muerte.
El control de enfermedades crónicas es fundamental para prevenir los infartos. Los galenos recomiendan a las personas mayores de 30 años que se realicen chequeos anuales o periódicos dependiendo de la condición física para despistar cualquier funcionamiento anormal del organismo.DLR/jd