Bloqueos en carreteras, cierre de algunas escuelas y comercios e interrupciones en los servicios de trenes experimentan varias ciudades del territorio francés este jueves, en la novena jornada de huelgas y protestas tras la aprobación por decreto de la reforma pensional.
Las declaraciones del mandatario francés, Emmanuel Macron, un día antes, para defender la enmienda no han calmado los ánimos y los sindicatos consideran extender aún más las movilizaciones.
Los sindicatos vuelven a marchar de forma masiva en Francia contra la reforma a las pensiones. Esta es la novena jornada de huelga en los últimos meses y, en esta ocasión, la salida se hace después de que la ley haya sido aceptada y el Gobierno de Emmanuel Macron haya conseguido sobrevivir a dos mociones de censura planteadas por la oposición.
Además, las palabras del presidente en una entrevista retransmitida a nivel nacional, en donde reafirmó sus posiciones, no han sentado bien a los sindicatos.
Macron se resiste a cualquier tipo de modificación o diálogo con los sindicatos después de haber aprobado la enmienda por medio de un decreto de ley y sin haber sido votada en la Asamblea Nacional, la Cámara Baja del Parlamento.