María Elena Moreno, melaverdad@gmail.com.- Con menos ofertas cada día están las tiendas de electrodomésticos, donde afirman que desde octubre del año pasado no reciben suficientes despachos. Explican que por la falta de dólares para la importación ha sido imposible reponer el inventario en lo que va del 2015. Además deben lidiar con precios exorbitantes que ahuyentan a los compradores, a quienes el salario mínimo no les alcanza.
“Para comprar un televisor de 32 pulgadas necesitan como 10 sueldos mínimos. Es alarmante como la inflación no se frena. Cuando de suerte nos llega un despacho, la mayoría de las veces es con el precio duplicado”, explicó Jorge Zamora, vendedor de Catia la Mar.
Destacó que la línea blanca brilla por su ausencia al igual que la mayoría de los electrodomésticos menores como planchas, licuadoras, entre otros. “Estamos ofreciendo lo que quedó de diciembre; una mercancía de mediados de año que llegó cuando la última subasta de Sicad. Hay proveedores que se han desaparecido y marcas como la Oster que cada vez se consiguen menos”.
Informó que los colchones, juegos de recibo y comedor se dispararon en un 100% y se consiguen sobre los Bs. 40 mil. “Lo poco que tenemos para ofrecer no sale, tenemos las ventas frías y no tenemos rumores si quiera de mejoras”.
Cerraron el chorro al sector de electrodomésticos
El sector privado ya adeuda a los proveedores la suma de más de 500 millones de dólares, según datos de la Asociación Nacional de Fabricantes y Distribuidores de Electrodomésticos (Anafade)
Ensamblar en el país se volvió imposible, ya que para piezas tampoco hay dólares. La Anafade dio a conocer mediante varios comunicados que en el 2014 solo se asignaron $324 millones al sector, cuando en el 2013 habían recibido $1.400 millones, lo que representa una caída de más del 100% en la asignación. Para las ensambladoras importar con divisas propias tampoco es una opción debido a los innumerables controles de precio.
Aumentó demanda de repuestos
Al no poder reponer los electrodomésticos por los altos precios muchos han optado por comprar los repuestos y pagar la reparación. Sin embargo, los mismos también llegan a cuenta gota y caros. “Eso también es importado y hay marcas que no llegaron más. Lo que más buscan son las cuchillas de licuadora, ya que además de caras las nuevas no se consiguen. El precio de este repuesto pasó de Bs. 320 a Bs. 570 en menos de un año”, destacó José Manuel Fernández, encargado de la Distribuidora Guri en Catia la Mar. /MEM/ep