Luisana Brito.- “Negras” se las están viendo los habitantes de la parroquia Maiquetía por las fallas con el suministro de agua potable. Aseguran que desde el seis de enero los grifos permanecen secos, lo que los obliga a cargar desde el tanque de Hidrocapital, ubicado en El Rincón, o en su defecto pagar cisternas.
Marivic Fernández, cuenta cómo diariamente después de atender a sus hijos y mandarlos al colegio, se apuesta en la entrada del tanque con su cesta llena de bidones para hacer cola, ya que no es la única que se ve afectada por esta situación.
“Aquí he hecho amistades, porque paso más tiempo en cola que en mi propia casa. Mi esposo pasa todo el día trabajando para comprar comida, y las cisternas cobran muy caro. No me queda de otra que venir a cargar desde aquí”, dijo Fernández.
La misma travesía la hace Magdalena Zavaleta, a diferencia de que ella se traslada hasta Piedra Azul para llenar de la montaña. “Cuando la cola está muy larga me voy a Piedra Azul. Allí algunos vecinos nos prestan colaboración, aunque se tarda un poco más porque sale poca agua”.LB/dr