Más de seis meses lleva el derrame de aguas residuales que afecta a los habitantes de la zona de Caribe, en Caraballeda.
Los habitantes ya no hayan a quién acudir porque el problema no ha sido atendido. La situación ha generado condiciones insalubres en la zona, un hedor que les resta calidad de vida, proliferación de insectos y riesgo de enfermedades.
A pesar de las reiteradas denuncias y llamados a Hidrocapital por parte de la comunidad, las autoridades no han implementado soluciones efectivas para detener el derrame, lo que los mantiene en alerta constante.SR/jd