Se dispara el consumo de ansiolíticos en menores a 50 años
Cada vez son más las personas menores de 50 años que acuden a las farmacias para la compra de antidepresivos o ansiolíticos, sobre todos aquellos recetados por los psiquiatras para tratar problemas de ansiedad y falta de sueño.
Primero fue la era post pandemia que condujo a que los niveles de estrés y de ansiedad se elevasen. Ahora es la crisis económica y social que en más de una década ha deteriorado considerablemente la salud mental de la población.
El doctor Lino Texeira, de la Farmacia El Brillante en Maiquetía, destacó que las ventas de estos fármacos han aumentado, pero se ha reducido la edad.
“Está siendo comercializado en personas más jóvenes que no deberían sufrir del trastorno del sueño, ansiedad ni problemas depresivos. Es algo alarmante”.
Dijo que la edad oscilan entre los 35 y 50 años, lo cual no es lo normal a esas edades. Los más solicitados son la del trastorno del sueño y de personalidad como el alprazolam.
Según Psicodata 2024, la mayoría de la población se considera optimista, pero 20% sufre niveles moderados o altos de ansiedad y depresión, 89% desconfía del otro y 37% percibe miedo colectivo.
Con respeto a los antihipertensivos, manifestó que también se han disparado las ventas en parte por el daño provocado por los productos importados de la India y China, los cuales fueron comercializados indiscriminadamente en algunos sectores.
“No tenían ninguna garantía fisioterapéutica para la administración de esos medicamentos. Su dosificación no era la adecuada y presentaba una serie de problemas que no estaban relacionadas con la farmodinámica de los fármacos.”
El losartán sigue siendo uno de los más demandados, también la amlodipina. Aunque últimamente se ha visto mucha resistencia a esos medicamentos y se está tratando con drogas nuevas como valsartán, pero todo dependerá de la patología del paciente
Aumentan entre 70% y 80%
Yolvis Salazar, aprendiz de farmacia de FarmaEconómica 777, manifestó que la venta de los antihipertensivos aumentaron un 70%, específicamente el losartán, amlodipina y carvedilol.
Sus precios varían según la marca o laboratorio y tabletas que traigan, por ejemplo el losartán desde 66 bolívares, el carvedilol por blÍster en 20 bolívares y amlodipina desde Bs 15 en adelante.
“El repunte ha sido por temporada, primero fueron los antigripales, ahora los antihipertensivos. Con la ola de calor la gente cuando se siente mal acude a nosotros porque saben que prestamos el servicio de medición de la presión arterial. Nosotros los consultamos para saber si son hipertensos o no. Les recomen- damos acudir a su médico”.
Mencionó que también ha habido un repunte en las ventas de antidepresivos y ansiolíticos. Los más económicos cuestan entre 145 y 200 bolívares, dependiendo del laboratorio.
En Farmaluc 24 horas, la farmacéutica regente Noraima Jiménez indicó que el consumo de antihipertensivos aumentó mucho, en 70%, mientras que la edad de los pacientes bajó. Llegan pacientes menores a 50 años.
Los más demandados son losartán y la cardiolipina. Los ansiolitícos también sufrieron un repunte en las ventas, aproximadamente un 80%. En cuanto a las edades, hay cierta paridad entre adultos mayores y jóvenes.
Sin embargo, comentó que no es normal que personas jóvenes consuman estos medicamentos. “Pero, el común denominador de la población, tanto en enfermedades crónicas como ansiolíticas, es general”.
Manifestó que otro fenómeno es la búsqueda del farmacéutico por asesoría, esto por la situación económica que impide a muchos acudir a una consulta médica.
“Nosotros podemos ayudarlos y orientarlos, mas no diagnosticarlos. Siempre con la recomendación de que vayan al doctor”.
Después de la pandemia
“He notado que a cada instante nos llegan recetas de médicos de Maiquetía o de Caracas pidiendo tratamiento para la depresión, sobre todo ansiolíticos.
Me llegó una señora solicitando un medicamento para su hijo de 30 años”, resaltó la farmacéutica Judith Medina, de la farmacia San José con 150 años de fundada.
Comentó que estos fármacos eran recetadas a las personas mayores, especialmente a las mujeres que quedaban viudas. Pero, en la actualidad el problema de depresión se presentan en todas las edades.
“Hay diferentes precios y muchas marcas porque la gente busca productos de marcas. Quieren productos de calidad”.
La especialista manifestó que la ansiedad y la depresión se dispararon después de la pandemia. “Ha mejorado un poco en los últimos meses, incluso para el sector farmacia. Aunque son más los clientes que buscan medicinas a bajo costo”.
En cuanto a los antihipertensivos, indicó que se han mantenido las ventas porque los que están en tratamiento lo cumplen a cabalidad.
Compran para dos o tres meses sin tienen el poder adquisitivo. En el mercado existe una gran variedad: amlodipina, candesartán, losartán, valsartán, entre otros.
En la Farmacia San José serán atendidos también por el farmacéutico Carlos Deseda y el auxiliar José Vallejos, conocido como Cheo.