Melchor, Gaspar y Baltasar traerán este jueves sus regalos a España escoltados por fuertes medidas de seguridad, destinadas a evitar atentados como el que recientemente dejó 12 muertos en un mercadillo navideño de Berlín.
Con motivo de la tradicional fiesta, que congrega en las calles a cientos de miles de familias, Madrid y Barcelona han decidido prohibir, salvo excepciones, la circulación de vehículos de más de 3,5 toneladas.
Se quiere prevenir así que un camión embista contra la muchedumbre, como hicieron sendos yihadistas en la ciudad francesa de Niza el 14 de julio pasado (86 muertos) y en Berlín este 19 de diciembre (12 muertos). Las autoridades españolas mantienen actualmente el nivel de alerta terrorista en 4 (sobre una escala de 5).
El ministerio del Interior indicó en un comunicado que por lo general habrá un «incremento de la presencia de patrullas uniformadas tanto a pie como en vehículo, en los itinerarios y en la zona inmediata de influencia».
Igualmente se prevén «retenes policiales de reacción en puntos estratégicos» de los itinerarios, y controles en los accesos de personas, según el ministerio, que no quiso precisar cuántos agentes serán movilizados entre policía nacional y policías locales.
En la capital española, donde se esperan cientos de miles de asistentes, la restricción de vehículos pesados fue anunciada desde este martes y hasta el jueves, para proteger la gran cabalgata del 5 de enero, que recorrerá 3 kilómetros del Paseo de la Castellana.
En los accesos a este gran eje norte-sur se colocarán obstáculos móviles, consistentes en patrullas y vallas. La medida rige igualmente para las 16 cabalgatas previstas en 14 distritos madrileños, entre el 3 y el 5 de enero.
En Barcelona, la medida se aplicará específicamente durante la gran cabalgata del jueves, de 5 kilómetros de recorrido, según indicó el ayuntamiento este miércoles en un comunicado. Una fuente municipal indicó a la AFP que se espera el mismo volumen de asistentes que el año pasado, unas 650.000 personas.
«Hemos tomado todas las medidas», incluyendo cortes circulatorios y «medios físicos que se instalan en zonas específicas y de riesgo», indicó por su lado el delegado del gobierno en Andalucía, Antonio Sanz. La fiesta de los Reyes Magos es una de las más populares en España.
Ciudades, pueblos y barrios organizan en sus calles desfiles de carrozas, en los que se reparten toneladas de caramelos en vísperas de la entrega de los regalos la mañana del 6 de enero, día de la Epifanía y feriado en todo el país.
Las autoridades españolas se llevaron un sobresalto cuando la semana pasada la policía encontró unos videos de dos presuntos yihadistas, que aparecían armados junto a unas imágenes de la madrileña Puerta del Sol.
Las autoridades no encontraron por el momento indicios concretos de preparación de un atentado por parte de los detenidos, ambos ciudadanos españoles. En cualquier caso, las celebraciones de Nochevieja tuvieron lugar bajo fuertes medidas de seguridad.
Para prevenir un ataque con un camión, la policía colocó en Madrid voluminosos obstáculos físicos alrededor de la Puerta del Sol, donde más de 20.000 personas se apiñaron para celebrar el nuevo año comiendo las tradicionales 12 uvas.