* Un penalti en el tiempo agregado le dio el descuento 3-1 ante la Juventus
Un tanto de penalti de Cristiano Ronaldo en el tiempo añadido clasificó al Real Madrid para las semifinales de la Liga de Campeones, que despidió a la Juventus, muerta en la orilla del éxito tras firmar un partido épico en el Santiago Bernabéu.
Tenía que ocurrir un milagro y los jugadores de la Juventus salieron al campo en su búsqueda y arrasaron en los primeros diez minutos, revolucionando la eliminatoria y poniendo nerviosos a novedades como Jesús Vallejo.
El defensor blanco pareció acusar la trascendencia del partido al suplir al suspendido Sergio Ramos y, en el segundo minuto, llegó el primer gol de Mario Mandzukic, que remató un centro desde la derecha de Sami Khedira. Se avecinaba un buen lío.
El problema llegó casi media hora más tarde, cuando apareció de nuevo Mandzukic con su cabeza para batir a Keylor Navas en una jugada parecida a la primera tras quitarse la marca de Casemiro.
Del lío, de repente se pasó al terror. Miedo, era la palabra que mejor definía el ambiente que se respiró en el Bernabéu al descanso.
En el inicio de la segunda parte, el Madrid consiguió controlar un poco más la pelota y frenó el ímpetu de la Juve. Pero la inquietud flotaba en el ambiente, porque el Real Madrid tampoco generaba peligro.
Y a falta de media hora ocurrió lo que le destino tenía preparado a los blancos cuando a Navas se le escapó un centro que rebañó Blaise Matuidi para poner el 3-0 en el marcador.
La peor pesadilla posible se instaló en el Bernabéu con el empate de la eliminatoria. Encima, el Real Madrid seguía sin generar nada. La Juventus no dejaba huecos y de vez en cuando rondaba el área de Navas.
Pero el fútbol es caprichoso y cruel. Cruel para la Juventus, que murió en la orilla porque Cristiano Ronaldo marcó de penalti en el minuto 97. Mehdi Benatia cometió la falta sobre Lucas Vázquez y Gianluigi Buffon, desesperado, fue expulsado.
El portero italiano se marchó cabizbajo mientras esperaba la sentencia desde la banda. Cristiano no falló Wojciec Szczesny salvó la temporada del Real Madrid.