El París Saint Germain y la Atalanta, a tres partidos de una primera corona europea para ambos, inician la Final 8 de la Liga de Campeones en Lisboa la tarde de este martes (3:00).
Tras superar la maldición de octavos, el PSG tratará de sobreponerse a la falta de ritmo y las lesiones de Marco Verratti (baja definitiva), y Kylian Mbappé, quien podría estar en el banquillo, para avanzar a semifinales.
Clasificarse sin sus mejores armas, cinco meses después del parón por la pandemia es el gran desafío que espera a Neymar y sus compañeros en el Estadio de la Luz, 50 años después de la creación oficial del PSG el 12 de agosto de 1970.
En una eliminatoria a partido único sin margen de error, el brasileño estará por fin presente en una gran cita para intentar llevar al PSG a lo más alto de Europa, tras perderse por lesiones las eliminatorias directas desde que lo fichó por un récord de 222 millones de euros hace tres años.
El nuevo formato, a puerta cerrada y bajo una gran vigilancia sanitaria, ofrece una oportunidad inédita al PSG y a sus propietarios qataríes de concretar ocho temporadas de inversiones en una consagración histórica.
Pero primero hay que eliminar a la Atalanta, equipo sorpresa de la temporada y con una de las ofensivas más temidas del continente con 98 goles en la liga italiana, donde terminó tercera.
Pero, como el PSG, la Atalanta no contará con dos de sus pesos pesados: el arquero Pierluigi Gollini y, sobre todo, el delantero Josip Ilicic, autor de 20 goles esta temporada.
Sin su jugador más talentoso, el club italiano tiene otras cartas en ataque para intentar sorprender a uno de los favoritos del torneo, como el argentino Alejandro Gómez y los colombianos Duván Zapata y Luis Muriel.