El Programa Venezolano de Educación-Acción en DDHH (Provea) denunció como detenciones arbitrarias el arresto de los sindicalistas petroleros Eudis Girot y Guillermo Zárraga.
Girot, quien es director ejecutivo de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela (Fputv), alertó sobre un procedimiento en su contra por parte de funcionarios de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim) la noche del miércoles.
Para Provea su detención y la de Zárraga, que ocurrió días antes, es “la confirmación de las detenciones arbitrarias y sistemáticas en Venezuela y el persistente acoso y persecución a sindicalistas no complacientes con las políticas antilaborales”.
Girot ha denunciado en los últimos meses la crisis dentro de Pdvsa, el grave deterioro de las refinerías y las detenciones de varios compañeros que protestan por las condiciones laborales.
La ONG defensora de derechos humanos recordó que este tipo de medidas contra dirigentes sindicales es una “criminalización a la opinión crítica y a la protesta social es una política de Estado, sistemática y generalizada”, que aplica la administración de Nicolás Maduro, con el apoyo de los poderes Judicial y Ciudadano.
Después de la alerta de Girot sobre la presencia de funcionarios de la Dgcim en su vivienda, sus compañeros de lucha sindical perdieron contacto con el dirigente anzoatiguense.
Por su parte, Zárraga está preso desde el 14 de noviembre, cuando irrumpieron en su residencia funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin).
Su hijo, Diego Zárraga, informó que el sindicalista del Centro Refinador Paraguaná (CRP) y secretario del Sindicato de Trabajadores de Petróleo, Gas y Energía de Falcón (Sutpgef), ya había sido detenido el 11 de noviembre, pero a los dos días lo liberaron y de nuevo lo detuvieron. «Se vuelven a violar sus derechos humanos y civiles”.