Roraima M. Herrera.- En diciembre del 2015, el oficial jefe de la policía Municipal de Vargas, Víctor Corro, reportó ante su comando que había sido objeto de un robo por un sujeto desconocido, donde además de despojarlo de su celular y objetos personales, le quitó también su arma de reglamento.
Tras varios meses de investigación y al realizar la comparación de las declaraciones que emitiera en el departamento de investigación y control interno del órgano al que pertenece y al Cicpc, evidenciaron que mantenía tres versiones distintas por lo que el director de la Polimunicipal, comisionado jefe Manuel Romero, ordenó ponerlo a derecho y la Fiscalía emitió una orden de presentación por presunta simulación de un hecho punible.
“No voy a permitir que la moral de nuestra institución y de mis uniformados se vea empañada por la imagen de algunos. Sabemos que tenemos deficiencias pero no aceptaré esto como excusa para que mis efectivos se presten a ser o a pactar con delincuentes”.
Señala que desde su llegada ha recibido la solicitud de nueve bajas y todas las ha concedido. “Nadie está obligado a estar dónde no quiere y celebro que sean honestos, por ello no descarto que la cifra siga en ascenso”.
Añadió que ha evaluado el caso de los policías “reposeros”, y de 19 ordenó la incorporación inmediata de 14, emitiendo a la vez, una orden al Colegio de Médicos Nacional para que investiguen a los profesionales que emitieron esos reposos dudosos. /RMH/iv