Al final de la cadena de comercialización se ubican los consumidores quienes sufren directamente las numerosas alzas de los bienes y servicios.
Muchos comerciantes atribuyen estos ajustes a la dificultad para conseguir mercancía a tipo de cambio oficial. Ante el cierre de estas salidas oficiales, los importadores optan por el mercado negro donde la tarifa por dólar supera los Bs. 100 impactando así el costo de los productos.
Lo ideal sería que el Gobierno vendiera los dólares a los cambios que ellos mismos han puesto, pero no los venden y son los únicos que tienen. “Muchos importadores intentan con Sicad I y Sicad II pero no obtienen respuesta, entonces se van al mercado negro donde los precios asustan. Eso al final afecta al bolsillo”, explicó Ray Castillo.
Los venezolanos temen que este tipo de cambio alterno continúe un patrón ascendente haciendo inalcanzables los artículos para la temporada decembrina. “No me quiero imaginar en cuánto cerrará el año. Lo cierto es que cada vez el sueldo alcanza menos y cuando uno pregunta por qué todo está caro te sacan el dólar. Dentro de poco ni siquiera se va a poder comer, habrá que ingeniárselas. Nos comeremos unos a otros será” comentó Antonio Carrasquel. //MEM/BG.