Por hambre cerraron la calle

Amy Torres, [email protected] Inconformes con el último despacho, en el que las bolsas además de chucutas llegaron con productos vencidos, y en la desesperación por darle de comer a sus hijos, más de 40 habitantes de Santa Eduvigis trancaron los accesos a la comunidad para exigir comida desde las 7:00 am hasta el mediodía.

Luis Rodríguez, vecino del Sector Cuatro, explicó que “primero mandaron una bolsa incompleta con la excusa de que no había comida. Encima el arroz llegó piche, así como la azúcar. Uno no se explica cómo mandan recursos para otros países mientras nosotros estamos pasando hambre en nuestra casa”.

Otra de las que alzó su voz fue Carmen Luisa González, quien se quejó porque el arroz y la harina de maíz se los mandaron vencidos. “Los niños se enfermaron con diarrea. Aparte, nos tocaba comprar el miércoles y esta es la fecha en que no hemos podido”.

Los vecinos se plantaron en medio de la vía, donde también colocaron bolsas de basura. Esta situación afectó la descarga de desperdicios en el relleno del mismo nombre de la comunidad, por lo que se contabilizaban más de 10 camiones varados.

Judith López dijo que requerían la presencia del gobernador García Carneiro o de la responsable de alimentación, Jeimy Pinto. “Tenemos 17 días sin ser surtidos”.

“Cada vez que a ellos les da la gana de decir que no hay comida nos vulneran nuestros derechos y el de nuestros hijos a la alimentación. No es justo que tenga que comer lo que ellos me manden, cuando en la Constitución está consagrado el derecho a una alimentación justa y balanceada”, señaló Alejandro Caraballo.

Al lugar se presentaron comisiones de Polivargas, Polimunicipal y de la PNB, que mediaron. De hecho, se designó a una pequeña comisión de los protestantes, que se entrevistarían junto a los uniformados con la responsable de la alimentación de Urimare.

Pero, luego de varios minutos llegó la mala noticia: no había bolsas para despachar a los vecinos.

Sin embargo las autoridades se comprometiero a surtirlos la próxima semana.

El anuncio generó momentos de tensión y algunas madres se fueron en llanto.

“¿Cómo le digo a mis hijos que tienen que esperar hasta la semana que viene para comer?, se lamentó una madre joven entre sollozos de impotencia.

Justo en ese instante, la policía regional aprovechó de reabrir el paso, situación que arrojó la detención de uno de los participantes en la tranca. Algunas de las mujeres recibieron descargas de electricidad y hasta hubo algunas detonaciones al aire./AT