«Venezuela tiene más de 15 años con una inflación que es considerada como una de la más alta del mundo. Esto se debe a una política económica incoherente que ha llevado al país a un despeñadero, sembrando miseria en la población», expresa Rusvel Gutiérrez, presidente de Caduainco.
Indica que destruyeron el aparato productivo y enterraron el bolívar, por lo que se vislumbra un panorama nada bueno si no se toman medidas urgentes, tendentes a reactivar la economía.
Sostiene que la economía se ha dolarizado de facto y esto se debe en gran parte a la desvalorización, así como a la falta de confianza en el cono monetario.
Resalta que el sector laboral enfrenta una crisis, sobre todo los empleados públicos, quienes tratan de sobrevivir con un salario de Bs 1.200.000 cuando la canasta alimentaria está en 111 millones de bolívares.
Indica que mientras esto sucede, el régimen basa su política económica en el llamado Plan de la Patria que carece de sustentabilidad y condena a los trabajadores a la pobreza extrema.BR/jd