Luis López.- Una bolsa amarrada a un mecate lanza uno de los funcionarios del Cicpc desde un primer nivel del retén de Caraballeda, para recoger los alimentos que a diario familiares le llevan a los detenidos.
En dos celdas están más de 300 reclusos. Escabiosis, amibiasis, fiebre y problemas respiratorios son parte de las enfermedades que presentan quienes están de tránsito por este centro de reclusión.
Algunos de los privados de libertad están sentenciados, pero no han sido trasladados a las cárceles asignadas por falta de cupos. “Mi esposo fue sentenciado desde hace un mes a cumplir pena de seis años por estar involucrado en homicidio, pero aún sigue en este lugar en condiciones inhumanas”, dijo la esposa de uno de los detenidos, quien solicitó no ser identificada.
“Hay miedo de que arremetan contra los presos. Los tratan como perros”, dijo un joven que tiene a uno de sus hermanos preso en el lugar.
Falla agua en Macuto
Jarras con agua llevan a diario los familiares al retén de Macuto, para el aseo de más de 300 detenidos en celdas igualmente estrechas. En el lugar están en resguardo parte de los 27 involucrados en el caso de las narcomaletas de Air France, desde marzo del 2014.
El juicio se inició en enero de este año y se espera que la juez asignada al caso sentencie a favor de quienes están presos injustamente, relató uno de los familiares.
Por otra parte, en la sede de la Policía Municipal se encuentran por lo menos 120 detenidos en condiciones precarias. “El lugar solo fue habilitado para retención preventiva”, comentó el abogado Oscar Hernández.
Positivo construir una cárcel
“Es posible y necesario un retén para Vargas. Éste es un estado pujante, con una gran población, y no escapa al problema delictivo que genera el desarrollo de una región”, expresó Hernández.
Señaló que en el caso particular del Puerto y Aeropuerto se cometen a diario delitos comunes y especiales. “No solo contar con un circuito judicial autónomo, sino con las instituciones apropiadas para el depósito, custodia y retención de los privados de libertad”.
Reiteró que en el retén de Caraballeda son aproximadamente 300, entre retenidos y sentenciados. “Las instalaciones solo tienen capacidad para 150 presos”.
Macuto supera los 300, y en la Policía Municipal existen entre 120 y 150 privados de libertad./ar